El Dr. Alés participa y coordina la 16ª RAGMA de GEICAM

16ª Revisión Anual GEICAM de Avances en Cáncer de Mama (RAGMA23), que celebra el Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama y en la que ha participado el Dr. José Enrique Alés, director de Investigación en Oncología del Centro en Patología de la Mama – Fundación Tejerina y coordinador de RAGMA23.

Los innovaciones tecnológicas y en biología molecular han permitido identificar que algunas células tumorales de la mama cuentan con la capacidad de migrar desde el tumor primario a otros órganos, donde permanecen latentes durante años pero con la posibilidad de provocar una metástasis con el tiempo, según se ha puesto de manifiesto en la presentación de la 16ª Revisión Anual GEICAM de Avances en Cáncer de Mama (RAGMA23), que celebra el Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama y en la que ha participado el Dr. José Enrique Alés, director de Investigación en Oncología del Centro en Patología de la Mama – Fundación Tejerina y coordinador de RAGMA23.

“Al observar estas células cancerosas que se diseminan por microscopía a través de técnicas de imagen de alta resolución a tiempo real, vemos cómo es su movimiento y cómo logran introducirse en los vasos sanguíneos de manera más eficiente, con la doble ventaja de ser capaces de viajar a otros órganos como el pulmón y quedarse en ellos ‘durmientes’ hasta que, pasado un tiempo, despiertan y pueden provocar metástasis”, ha explicado el doctor José Javier Bravo-Cordero, profesor asociado de Hematología y Oncología Médica del Tisch Cancer Institute del Hospital Mount Sinaí, en Nueva York, que participa en dicho encuentro científico.

El doctor Carlos Barrios, cofundador y director del Latin American Cooperative Oncology Group (LACOG), ha hecho hincapié en la complejidad de este tipo de tumor. “Esta es parte integral y natural de la evolución de la enfermedad. Los avances tecnológicos de las últimas dos décadas han permitido que reconozcamos esta complejidad y han dado origen a lo que llamamos hoy medicina personalizada (o de precisión)”. Sin embargo, considera que, por el mismo motivo de la complejidad de cáncer, “es también fundamental reconocer las limitaciones que tiene la genómica individualizada que caracteriza la medicina de precisión, pues los genes no guardan todos los secretos y no tienen las respuestas a todas las preguntas

El doctor Barrios vaticina un futuro “brillante” para el tratamiento del cáncer de mama, cimentado en los avances tecnológicos, que contribuyen a mejorar la capacidad de diagnosticar y clasificar a los pacientes de forma más precisa. “Cada vez más, estamos reconociendo que, contra la complejidad, necesitamos más de una estrategia de tratamiento”, ha subrayado este especialista.

Tal como ha apuntado el doctor José Enrique Alés, coordinador de RAGMA23 y director de Investigación del Centro de Patología de la Mama-Fundación Tejerina, a estos avances se suman los anticuerpos conjugados, que logran que la quimioterapia sea más precisa; la inmunoterapia, una de las expectativas más esperanzadoras de los últimos años, especialmente alentadora en cáncer de mama triple negativo; o los inhibidores de ciclinas en la enfermedad precoz, ha enumerado. 

Otro aspecto destacado de RAGMA23 son las perspectivas con los ADC dirigidos al subtipo tumoral HER2 low, que permiten una nueva arma terapéutica muy eficaz para un espectro de pacientes con cáncer de mama que expresan la molécula HER2 por debajo de los niveles considerados hasta ahora como necesarios para un tratamiento dirigido.

Por su parte, Paula González, miembro de la Federación Española de Cáncer de Mama (FECMA), ha expresado: «Este encuentro de GEICAM, en el que se ponen sobre la mesa algunas de las investigaciones más prometedoras en cáncer de mama, es un foro clave en el que, como pacientes, nos vemos en la necesidad de reivindicar inversiones en investigación y apoyar el trabajo de los grupos cooperativos y las sociedades científicas”.

Además, ha aprovechado para recalcar algunos puntos sobre los que aún se debe seguir trabajando: “Las mujeres que un día reciben el diagnóstico de cáncer de mama saben que la metástasis es una patología que estadísticamente afecta a un 30% de esas mujeres diagnosticadas, que se une al 5-6% de pacientes que ya presentan metástasis en el momento del diagnóstico. Y es aquí, en enfermedad metastásica, donde aún queda camino por recorrer y donde entendemos que deben concentrarse los esfuerzos; hoy hay aún un alto porcentaje de pacientes con metástasis de muy compleja y difícil solución, por lo que tenemos que seguir impulsando la actividad investigadora porque es la única vía para avanzar en la mejora de la supervivencia y de la calidad de vida en cáncer de mama», ha concluido la representante de FECMA.

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